Preaching "The Gospel" can be very intimidating, especially to people we know. Sometimes we know what we want to say but when given the opportunity our words just get all jumbled up. There is so much to say about our God, so many good things to recall. Trying to put our feelings about Him into words can be very difficult. There are many times we will not feel qualified to preach the Gospel. But what if we didn't think of it as preaching, teaching or evangalizing? What if we just looked at it as small candid conversations between friends. If we approach it in this sense then preaching The Gospel would not feel so intimidating. Then we would not withhold the biggest gift and power back in someones life. We see in Romans 1:16 - that The Gospel is the power of God at work in someone. God has chosen to use the testimony of Jesus Christ to save us and others like us. Those who have felt or been abandon, lost, hungry, scared, rejected and betrayed. Those who have been over looked and left for dead. The Gospel is the power of God willing and able to restore us, reconcile us, and transform us.
16 For I am not ashamed of this Good News about Christ. It is the power of God at work, saving everyone who believes... - Romans 1:16a (NLT)
As we begin to have candid conversation of Jesus' testimony, we will begin to tell our testimony, because there is no us without Him. My faith has made me whole, but my faith must be rooted and planted in The Gospel. As we share who Jesus was and is, we are planting a seed that has the power to break strongholds, generational curses and any bondage the enemy may have used. We prepare the way for the one that is to come, for the work that God is about to do in their lives simply by having a candid conversation.
17 This Good News tells us how God makes us right in his sight. This is accomplished from start to finish by faith... - Romans 1:17a (NLT)
Telling people how much we love God will not save them, but telling them how much He loves them and what He did to demonstrate that love will change their whole world. The Word of God - The Gospel - Jesus, it breaks us, cleanses us, rebuilds us up, and makes us into something new and beautiful. The Gospel is what makes us grow with God, without it we will be stagnant. Accepting The Gospel is believing in Jesus- that is true faith. It is not as important what we do for God rather what we say and think about Him. In words, deeds and thought we need to remember and love The Gospel. Everyday that we read The Word, meditate on The Word and obey The Word we are adding to Jesus' testimony as well as our own.
Brothers and Sisters, will you be willing to have candid conversation with those you know and love as well as with strangers who's paths we cross, telling them about our heavenly Father who sent down His son to be a living sacrifice for our past, present and future sins? About Christ who suffered a criminals death so that we wouldn't have to and because of that sacrifice we get to have free access to God. And if we believe this sacrifice with all our hearts' we get to call Him Father. This Christmas and everyday let's look for opportunities to have a candid conversation with a friend. Merry CHRISTmas! You are loved.
*Please read Isaiah 53
El Poder Del Evangelio
Predicar "El Evangelio" puede ser muy intimidante, especialmente para las personas que conocemos. A veces sabemos lo que queremos decir, pero cuando se nos da la oportunidad nuestras palabras simplemente se confunden. Hay tanto que decir sobre nuestro Dios, tantas cosas buenas que recordar. Tratar de expresar con palabras nuestras sentimientos hacia Él puede ser muy difícil. Muchas veces no nos sentiremos capacitados para predicar el Evangelio. Pero ¿qué pasaría si no pensáramos en ello como predicar, enseñar o evangelizar? ¿Qué pasaría si lo viéramos simplemente como pequeñas conversaciones sinceras entre amigos? Si lo abordamos en este sentido, entonces predicar el Evangelio no resultaría tan intimidante. Entonces no retendríamos el mayor regalo y poder en la vida de alguien. Vemos en Romanos 1:16 que el Evangelio es el poder de Dios obrando en alguien. Dios ha elegido usar el testimonio de Jesucristo para salvarnos a nosotros y a otros como nosotros. Los que se han sentido o han sido abandonados, perdidos, hambrientos, asustados, rechazados y traicionados. Los que han sido pasados por alto y dados por muertos. El Evangelio es el poder de Dios dispuesto y capaz de restaurarnos, reconciliarnos y transformarnos.
16 Pues no me avergüenzo de la Buena Noticia acerca de Cristo, porque es poder de Dios en acción para salvar a todos los que creen... - Romanos 1:16a (NTV)
A medida que comencemos a tener una conversación sincera sobre el testimonio de Jesús, comenzaremos a contar nuestro testimonio, porque no existe un nosotros sin Él. Mi fe me ha sanado, pero mi fe debe estar arraigada y plantada en el Evangelio. Al compartir quién fue y es Jesús, estamos plantando una semilla que tiene el poder de romper fortalezas, maldiciones generacionales y cualquier esclavitud que el enemigo haya usado. Preparamos el camino para lo que está por venir, para la obra que Dios está a punto de hacer en sus vidas simplemente con tener una conversación sincera.
17 Esa Buena Noticia nos revela cómo Dios nos hace justos ante sus ojos, lo cual se logra del principio al fin por medio de la fe... - Romanos 1:17a (NTV)
Decirle a la gente cuánto amamos a Dios no los salvará, pero decirles cuánto los ama Él y lo que hizo para demostrar ese amor cambiará todo su mundo. La Palabra de Dios - El Evangelio - Jesús, nos quebranta, nos limpia, nos reconstruye y nos convierte en algo nuevo y hermoso. El Evangelio es lo que nos hace crecer con Dios, sin él estaremos estancados. Aceptar el Evangelio es creer en Jesús, esa es la verdadera fe. No es tan importante lo que hacemos por Dios sino lo que decimos y pensamos de Él. En palabras, hechos y pensamientos necesitamos recordar y amar el Evangelio. Cada día que leemos La Palabra, meditamos en La Palabra y obedecemos La Palabra, estamos añadiendo al testimonio de Jesús así como al nuestro propio.
Hermanos y hermanas, ¿estarían dispuestos a tener una conversación sincera con aquellos que conocen y aman, así como con extraños con cuyos caminos nos cruzamos, contándoles acerca de nuestro Padre celestial, quien envió a Su Hijo para ser un sacrificio vivo por nuestro pasado, presente y pecados futuros? Sobre Cristo que sufrió la muerte de un criminal para que nosotros no tuviéramos que sufrir y gracias a ese sacrificio podamos tener libre acceso a Dios. Y si creemos en este sacrificio con todo nuestro corazón, podremos llamarlo Padre. Esta Navidad y todos los días busquemos oportunidades para tener una conversación sincera con un amigo. ¡Feliz navidad! Eres amado.
*Por favor lea Isaías 53.